La Madre de Dios estuvo en La Candelaria.

Arte Sacro. No era un día cualquiera, para nada. Es el día en el que el barrio luce sus mejores galas para compartir unas horas con la que da nombre al barrio, Nuestra Señora de la Candelaria, Madre de Dios.

Y allí estaba la Hermandad anfitriona con su director espiritual como gran promotor, los hermanos Viretti como transmisores de la devoción y el conjunto de hermanos como algo grande que se ha ido formando en este barrio al que ya consideramos amigo.

Y junto a ellos, representaciones del Carmen de San Gil, Calatrava y San Leandro, Rosario del Barrio León, San José Obrero, Desamparados de Alcosa, Pastora y Santa Marina y el Delegado de Glorias, Miguel Martínez. Regalo musical para Manuel Chocero, en cuyo recuerdo la Cruz Roja toco Virgen del Valle mientras su viuda recogía un ramillete de flores de la Virgen Gloriosa, que lucía esclava de oro donada por esta última.

La Virgen lucía aparte de las hermandades en el Cortejo, joyas prestadas por otras Hermandades de Gloria entre los que estaban Escapulario del Niño de la Virgen del Carmen de San Leandro, Camafeo de la Anunciación de Juan XXIII, colgante de "Rosario’’ en oro de Nuestra Señora del Rosario del Barrio León y ancla de oro de la Virgen del Carmen de Calatrava.

Fotos: Francisco Santiago